22 de septiembre de 2023

El tiempo de las audiencias ambivalentes

La ambivalencia es un estado de reacciones, creencias o sentimientos contradictorios simultáneos hacia algún objeto. Es decir, la ambivalencia es la experiencia de tener una actitud hacia alguien, hacia una idea o algo que contiene valores “positivos” y “negativos”. También se refiere a situaciones en las que se experimentan "sentimientos mixtos" de tipo más general, o en las que una persona experimenta incertidumbre o indecisión.

La ambivalencia es muy frecuente en posiciones políticas, sobre todo con marcos ideológicos sobrecargados. Por ejemplo, ¿Ser liberal, digamos en lo económico, y estar en contra del aborto es una contradicción o una ambivalencia?

Aunque las actitudes suelen guiar el comportamiento relacionado con la actitud, aquellas que se mantienen con ambivalencia tienden a hacerlo en menor medida. Cuando un individuo no está seguro de su actitud, se vuelve más influenciable, lo que hace que sus acciones futuras sean menos predecibles y/o menos decisivas. Las actitudes ambivalentes también son más susceptibles a la información transitoria, como el estado de ánimo, lo que puede influir en su evaluación. Sin embargo, las audiencias ambivalentes también piensan más en la información relevante para su actitud, lo que las hace más persuadidas por información convincente relacionada con su actitud que aquellas que son menos ambivalentes.

La ambivalencia puede o no ser experimentada como psicológicamente incómoda cuando los aspectos positivos y negativos de un tema están presentes en la mente de una persona al mismo tiempo. Esta ambivalencia psicológicamente incómoda, también conocida como disonancia cognitiva, puede llevar a la evitación, la procrastinación o intentos deliberados de resolverla. El mayor malestar por la ambivalencia se experimenta cuando la situación requiere tomar una decisión. Sin embargo, el grado de conciencia de la ambivalencia varía entre las personas, por lo que los efectos de este estado ambivalente también varían según los individuos y las situaciones. Por esta razón, los investigadores han considerado dos formas de ambivalencia, de las cuales solo una se experimenta subjetivamente como un conflicto interno.

Cuando las personas son ambivalentes y llegan a ver mérito en ambos lados de un tema, tienden a enfocarse en el lado que los demás están ignorando. Al dirigirse a una audiencia ambivalente desde la comunicación política (ya sea en campañas o acciones persuasivas), es útil resaltar el lado que les causa daño, dejando que ellos mismos enfaticen el otro lado, el lado preferido.

Como ejemplo, hace un tiempo, un referéndum en Suiza incluyó varios temas: el matrimonio igualitario fue ampliamente respaldado (64%), mientras que la iniciativa popular sobre impuestos fue ampliamente rechazada (65%). Mi punto es que este referéndum demuestra que no hay una solución única para todos y que las personas pueden cambiar de una posición "progresista" a una posición "conservadora" dependiendo del contexto, los términos del debate y los intereses.

En resumen, la ambivalencia es un estado complejo de contradicciones y sentimientos mixtos que influye en buena cuenta sobre nuestras actitudes, posiciones y comportamientos. Por tanto, tiende a ser cada vez más decisiva en toda acción persuasiva.

NotasComPol #2


28 de septiembre de 2021

El contraste


Se ha construido -y acaso instalado- una idea parcial y sesgada de las campañas de contraste. Muchas veces se la asocia únicamente al ataque, a la "guerra sucia", a la radical distancia entre mensajes, personajes, una candidatura o una narrativa respecto del extremo opuesto.

Por el contrario, el contraste debe ser "entendido como diferenciación, más que como ataque. Diferenciarnos en forma y en fondo. En símbolos e imágenes. En ideas y propuestas. Diferenciarnos de todos los contrincantes e inclusive de los antecesores", señala de manera precisa y concluyente el consultor político Ricardo Amado Castillo (2019).

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El contraste opera en función del contexto, los actores, la narrativa, los adversarios (que pueden ser contendientes, detractores o incluso blancos de una campaña de denuncia, por citar un ejemplo más cercano a acciones la sociedad civil) y sobre todo el cambio que se persigue.

Cierro con dos ejemplos distintos de contraste, con dos propósitos, actores, contextos y adversarios diferentes. El cambio, sin duda, es el eje central del mensaje, en el primero muy anclado en el discurso que diferencia desde la persuasión, en el segundo además en los símbolos y la estética que opera frontalmente, incluso con exceso.


Nota: Segundo post una serie de recursos analíticos concisos sobre comunicación política, medios, opinión pública y campañas. Para ver los demás recursos sigue #NotasComPol.

Referencias

10 de septiembre de 2021

La disonancia cognitiva en los medios y la política - notas #1


Si la realidad choca con nuestras convicciones más profundas y preferimos recalibrar la realidad antes que corregir nuestra visión del mundo, estamos frente a un fenómeno llamado disonancia cognitiva.

El engaño y la mentira son artilugios del poder, lo han sido desde siempre. Sin embargo, ahora -en los tiempos del internet y la posverdad- más que nunca, operan en la construcción de la opinión y el moldeado de las opiniones de la gente. Las emociones atraen la atención y otorgan cercanía a los discursos, a las narrativas, por lo que la disonancia cognitiva le añade matices que nos acercan a una “verdad aceptable y preferible”.

Estudiado por el psicólogo estadounidense Leon Festinger a mediados del siglo XX, la disonancia cognitiva es una teoría que se refiere a cuando un hecho se confronta con nuestras convicciones más profundas o sistemas de creencias preferimos recalibrar la realidad en nuestro propio cerebro, ajustar los argumentos a partir de nuestras propias creencias antes que corregir nuestra posición. Así, nuestro cerebro experimenta un malestar cuando dos cogniciones, o una cognición y un comportamiento, se contradicen, por lo que opta por la versión más confortable (Festinger, 1957) (Aronson y Tavris, 2020).

Captura: disonancia cognitiva UVG

La disonancia cognitiva nos impide admitir errores de una línea política o ideológica, por ejemplo, o posiciones contrapuestas a nuestras creencias. Se convierte en un recurso mental para parapetarse o encerrarse en una posición y desacreditar cualquier alternativa, lo cual, ante la polarización y la ausencia de respaldos concluyentes de medios o instituciones democráticas sólidas y aceptadas, la gente opta a “quién creerle”, reafirmando su decisión en una suma cero y dando un paso abierto a todas las teorías conspirativas que refuercen "su verdad".

El internet y la posverdad hacen el resto del trabajo.


Nota: Con este post inauguro una serie de recursos analíticos concisos sobre comunicación política, medios, opinión pública y campañas llamada #NotasComPol.

Referencias


16 de julio de 2021

Así va la #COVID-19 en América Latina y el Caribe: Gráficas y datos (actualizado al 15 de julio 2021)


América Latina y el Caribe (ALC) es una de las regiones más golpeadas por la Covid-19 del planeta. con apenas 8,4% de la población mundial, ALC registra 20,6% de los casos detectados y el 32,3% de las muertes por la enfermedad. Al menos se han perdido 1,32 millones de vidas (sabemos que hay un subregistro y son muchos más casos y muertes).

Uno de los mayores déficits durante la pandemia por Covid-19 han sido datos comparativos y comprensibles para la ciudadanía, que permita dimensionar la crisis y también presionar por respuestas más certeras.

Los rebrotes han sido cada uno peor que el otro y si bien el comportamiento de julio indica una desescalada del tercer rebrote, la baja vacunación y una sostenida meseta podría indicarnos un pronto cuarto rebrote como se muestra más abajo. Véase el gráfico el siguiente gráfico solo con casos del registro oficial:



El gráfico muestra que en realidad no hay olas, sino rebrotes constantes.

Sudamérica ha sido particularmente golpeada con más casos y Uruguay el país que más casos registra en proporción a su población (aunque en franca desescalada, con directa relación a su alta vacunación, más del 70% de la población). 

Aunque los datos de los últimos 14 días indican una preocupante alza en Centroamérica, precisamente donde hay aún baja vacunación. Panamá estuvo en ese "desastroso" primer podio, pero ahora comienza a decender. Colombia y Argentina van peligrosamente para arriba, vean esta carrera de barras dinámica:

En las últimas dos semanas, los países que más aceleran el registro de casos son:

  1. CUBA
  2. COLOMBIA
  3. GUATEMALA
  4. HONDURAS
  5. VENEZUELA
  6. ARGENTINA
  7. COSTA RICA
En total, contando los casos desde el inicio de la pandemia Sudamérica registra la gran mayoría de casos, estas son las proporciones por países:
  1. BRASIL, 49% de los casos
  2. ARGENTINA, 12% de los casos
  3. COLOMBIA, 11,7% de los casos
  4. MÉXICO, 6,7% de los casos
  5. PERÚ, 5,3% de los casos
  6. CHILE, 4,1% de los casos
  7. ECUADOR, 1,2% 
  8. BOLIVIA, 1,2%
Como se dijo al principio, ALC es la región más golpeada por muertes registradas en proporción a su población, tres de cada 10 muertes del total global. Por países, Perú es el peor golpeado del planeta, mientras estos son los datos del resto de la región:

Otro dato relevante para entender la afectación es la cantidad de test por población mostrado en el tuit arriba. A menor testeo, menor registro de casos, lo cual revelaría la ineficacia o desidia de algunos gobiernos como el de Nicaragua, Haití y México. Sí, México, a pesar de tener más de 2,6 millones de casos es el tercer peor país en testeo.

¿Cómo va la vacunación?

En términos agregados, una de cada 10 personas en la región ha completado un esquema de vacunación y tres de diez ha recibido al menos una dosis. No es una mala noticia, aunque sin duda insuficiente para la situación de contagio y afectación en la región que podría enfrentar un cuarto rebrote en el futuro cercano.

Esta gráfica interactiva resumen el curso por países y el agregado regional:


Hay una directa relación entre alta vacunación y descenso de casos como Chile y Uruguay y si bien la variante Delta comienza a preocupar hay diversos estudios que señalan la eficacia de las vacunas frente a las variantes.

Por eso urge avanzar y rápido en la vacunación masiva.

En cuando al origen de fabricación de las vacunas, en las últimas semanas ha crecido la proporción de los envíos desde EE.UU., aunque persiste el predominio de las vacunas chinas en la región:


y por origen de fabricación:


Ya se ven brechas de desigualdad dentro de la región. Los países más pobres de la región como Haití, Nicaragua, Guatemala y Honduras van muy atrás y les podría tomar años (y como ya se vieron los datos, es preocupante el ascenso de casos en Centroamérica incluso con el subregistro), mientras que quizá el resto de los países de la región logre el 20% de la inmunización, esto no significará el fin de la pandemia en la región.

Fuente de datos:

  • Casos y muertes Covid-19 en el mundo: https://www.worldometers.info/coronavirus/#countries 
  • Vacunación OPS/OMS: https://ais.paho.org/imm/IM_DosisAdmin-Vacunacion.asp y https://ourworldindata.org/covid-vaccinations
  • Datos México vacunación: https://serendipia.digital/covid-19/cuantas-vacunas-contra-covid-ha-aplicado-mexico/ 


9 de julio de 2021

Los gigantes tecnológicos y el modelo "panóptico"


Hace algunos días, la la Escuela de Gestión Pública Plurinacional de Bolivia (EGPP) me invitó a presentar una ponencia y compartir un panel en el Webinar GIGANTES TECNOLÓGICOS: GEOPOLÍTICA, PODER Y DEMOCRACIA.

En una perspectiva histórica, los cambios tecnológicos de los últimos dos siglos han sido asombrosos, sin embargo vivimos un momento de incertidumbre equidistante a la velocidad del poder de la tecnología. José María Lassalle (escritor de El liberalismo herido) nos habla de una pérdida del rumbo, “estamos aturdidos ante el espectáculo de tanto poder y tanta incapacidad de gestionar adecuadamente este poder”.

Las grandes empresas tecnológicas, en buena cuenta, se sustentan en ideas cercanas a Alex Pentland (2011 y antes): desde una visión “hiper sistémica”, se auto atribuyen la capacidad de ser el “sistema nervioso” de la sociedad, poder regir desde los sistemas de provisión de servicios básicos, el transporte, las elecciones y por supuesto, el comercio y la publicidad. 

Al mismo tiempo, las corrientes “libertarias” occidentales y diversos “conservadurismos” han desplegado sus estrategias comunicativas y de poder entendiendo el peso específico actual y creciente de los gigantes tecnológicos globales, en un momento de crisis del liberalismo y de desigualdades extremas, que transcurre hacia un creciente conservadurismo hipermediatizado. Así por ejemplo, hay una especie de "libre interpretación" de los derechos y los fundamentos del contrato social. 

Pero este conflicto no solo está instalado en el poder de los gigantes tecnológicos, sino también en la concentración de poder y tecnología de algunos Gobiernos. Lo que llamo, un "modelo panóptico" como el chino. 

En la ponencia (vídeo a continuación), propongo ámbitos de discusión para la regulación de las plataformas sociales en internet, así como salidas hacia tecnologías más humanas.


23 de mayo de 2021

Vivir como creador de contenidos

 

Millones de personas lo intentan a diario. Ser un creador de contenidos se ha vuelto una aspiración para la fauna internauta. Desde gamers haciendo streaming de sus partidas, podcasteros, tiktokers, pasando por músicos independientes y hasta la pornografía casera, a diario hay cientos de miles de personas generando contenidos ern internet e intentando monetizar e independizarse.

¿Se puede vivir como creador de contenidos?

La respuesta genérica es que depende del contenido, la calidad, la comunidad que lo acoja y la  codiciada viralidad, si dejar afuera la suerte. 

Pero veamos algunos ejemplos: de los 7 millones de productores de contenidos en Spotify, músicos que suben más de 60 mil canciones cada día, apenas 184 mil logran ganar más de mil dólares al año, 83 dólares al mes. Solo unos 42 mil artistas en el mundo ganan unos 850 dólares al mes a través de esa plataforma. Mira el cuadro de The Economist:


Otras formas novedosas de monetizar por contenidos contenidos propios o las interacciones. Substack ofrece un servicio que te cobra un porcentaje de lo que lectores paguen por leer tus textos -periodistas, escritores y otros están optando por este tipo de plataformas. Uno de los puntos de contacto renovado es el boletín (newsletter), que alienta más suscripciones y por ende más ingresos.

Otro ámbito más disruptivo son aplicaciones como NewNew, por las que 'influencers' generan ingresos preguntando desde trivialidades hasta decisiones de vida, que deben luego grabarse cumpliéndolas, y que los usuarios pagan para votar. Y no dejo de mencionar la pornografía con el sitio británico OnlyFans que entrega la opción de "venta directa", aunque con numerosas historias de fracaso, muchas horas invertidas y poquísimos dólares de ganancias.

Pero seguro que están pensando en YouTube. Ser iutuber es el wannabe de la década. De HolaSoyGernanLuisito comunica a Ibai (un fenómeno), estos se han convertido en referentes del segmento y seguro que ingresan mucho, pero los márgenes para el resto de mortales es escaso.

En España, YouTube paga aproximadamente, entre 0,40 céntimos de euro y 4 euros por cada mil vistas (una vez el canal tiene al menos 4 mil suscripciones y 40 mil reproducciones mes en un año). En América Latina, los valores son inferiores, pero oscilan entre 0,25 y 4,50 dólares por cada 1000 vistas.

Y no se crean, llegar a 50 o 60 mil reproducciones no es sencillo.


Verás, se trata de combinar un serie de varios factores. Desde talento, muchas horas de dedicación,  persistencia, estudio de mercado, soporte profesional en producción audiovisual, contacto comercial con marcas, mercadeo, segmentación en distintas plataformas y contenidos nativos en cada una de ellas y recursos.

10 de abril de 2021

Soy Jurado


El momento electoral es el acto de materializar un parte importante de la democracia, la representación política de la gente, al tiempo que es un rito ciudadano. En Bolivia tiene varias aristas peculiares, como la obligatoriedad -además del derecho- a votar, la no circulación libre de ese día y toda una secuencia durante la jornada electoral.

El pasado 7 de marzo me tocó por primera vez ser jurado electoral justo en medio de la pandemia (apenas fuimos 3 jurados para toda la mesa), en un contexto de alta polarización política y con una elección subnacional donde se elegían 5 niveles de representación con listas de entre 14 y 16 candidaturas. 

credencial de jurado electoral - Bolivia 2021

Ese día compartí algunos pasajes "en vivo" de la experiencia en un hilo de Twitter -que se puede a continuación y en este enlace-, pero como fuimos apenas alcanzamos el mínimo de jurados en la mesa requeridos, nos llevó algo más de 15 horas continuas de trabajo procedimental con apenas unos breves intervalos de descanso.

A casi un mes de la jornada, recojo reflexiones más digeridas en este post que sigue más abajo, diría incluso que una etnografía del electorado, el despliegue partidario (del MAS) y el voto. La experiencia me permitió observar el comportamiento social y político en mi mesa de manera mucho más cercana a la experiencia regular de ir a votar y volver al conteo de votos.

Un hecho recurrente en muchas mesas del país y verificable por los datos del cómputo oficial es que los votos por concejales y asambleístas recibe mucho más votos blancos y nulos que por alcalde y gobernador/a. Es más, la última franja, de asambleístas por población no tenía fotos y fue aún más pifiada que las filas otras filas.

9 de marzo de 2021

Así se conforman los Concejos municipales en Bolivia 2021-2026 [INFOGRAFÍAS]:


Comparto en este post la conformación final de los Concejos municipales en las diez principales urbes de Bolivia. Los resultados reflejan el cómputo registrado en el sitio de cómputo oficial del TSE del país.

Al final del post comparto la metodología y las herramientas usadas, pueden servir para la réplica o aprendizaje.


7 de febrero de 2021

la vacuna "socialista"


La publicación en  revista científica The Lancet le dio aval a la vacuna Sputnik V, la vacuna rusa desarrollada por el hasta ahora nada prestigioso Centro Gamaleya, dando un giro de certezas a las varias dudas (diría que justificadas por la opacidad del régimen ruso) que despertaba hasta ahora por su anuncio anticipado y sin publicación de pruebas clínicas de fase tres. 

Hay razones para sentir alivio. La eficacia del 91%, la capacidad de transporte y almacenado en condiciones menos exigentes de frío (comparada con Pfizer o Moderna), el precio y la tecnología tecnología de vector viral que también es utilizada por las vacunas de AstraZeneca y que permitiría estudiarse colaboraciones y producción masiva en muchas partes del mundo. Insisto, son buenas noticias.

En tiempos de posverdad, con un creciente escepticismo hacia las vacunas (aunque parezca increíble), descréditos y manipulación mediática y política de la pandemia y una diplomacia/geopolítica de las vacunas en creciente intensidad, me resultó singularmente llamativo la narrativa de la vacuna "socialista" al referirse a la Sputnik V. 

foto: Wikimedia Commons

Desde ataques hasta elogios, una vez se anunció la compra en Argentina para luego irse considerando en otros países de América Latina, un ángulo del debate y la polémica estuvo enmarcado sobre el supuesto "origen socialista" de la vacuna rusa.

¿Rusia socialista? Conciso y directo, esto dice Putin:

Las relaciones contrahegemónicas de Rusia en América Latina le han fijado en un espectro narrativo de "socialista", siendo que el régimen ruso es más bien nacionalista con un capitalismo agresivo y control estatal de grandes industrias estratégicas. A su vez, Rusia es capaz de alentar narrativas contrahegemónicas aún a pesar de que se le perciba -siempre hacia afuera del mundo rusofónico- como aliado del socialismo. 

El desarrollo tecnológico ruso tiene fuertes contradicciones, una tradición imperial -anterior a la Unión Soviética, téngase siempre en cuenta- expansionista, un agresivo control de recursos naturales y mercados asociados, así como una heredada industria del tiempo soviético que aún le permite ser una potencia industrial (y hasta espacial).

Las narrativas en la posverdad juegan un rol decisivo para construir o inventan "argumentos" que luego desacrediten o habiliten ciertos actores o resultados, como la vacuna rusa, no precisamente por sus condiciones materiales o demostradas, sino por el aura que la condiciones alrededor. 


24 de octubre de 2020

Fue la estrategia

El río de tinta sigue corriendo tratando de “explicar” el resultado electoral del pasado 18 de octubre en Bolivia, sin duda cargado de sorpresa incluso para los hoy ganadores.

En este ensayo, argumento que fue la estrategia electoral el principal factor de la victoria del MAS. Una victoria labrada con acciones tácticas sobre diversos segmentos, una expansión territorial bien trabajada, un efecto "tijera" sobre Mesa y una cadena de sucesos que fueron arrinconando a los oponentes en una polarización autodestructiva en Santa Cruz y le fueron dejando el campo libre al MAS. 

Por su extensión, comparto una versión del ensayo que sigue más abajo en vídeo:


El rediseño de la campaña

Una de las cuestiones estratégicas de arranque en cualquier campaña es la conformación de la oferta electoral, salvo que en este caso tendríamos que ver un “rediseño[i]”, pues las fuerzas en contienda llevan casi 2 años en campaña.

Paramos por el Movimiento al Socialismo (MAS), que tuvo una candidatura prolija, equilibrada y con potencia expansiva en Luis Arce y David Choquehuanca. Ofrece a su primer núcleo electoral perfiles bastante equilibrados. Campo / ciudad, identidad (de “izquierda” e indígena) / perfil profesional, humildad / condiciones para gestionar la crisis. Un binomio eminentemente de “tierras altas” que además, como se verá, consolida y expande su núcleo desde occidente.