Los latinos tenemos una fecha especial en el verano londinense, el primer domingo de agosto se celebra el Carnaval del Pueblo. De más estará decir la esencia fiestera y bailadora que tod@s, con nuestras particularidades y diferencias, compartimos y reproducimos allí donde estemos. Esto, sumado al creciente número de latinos migrando a estas latitudes, ha generado el festival latinoamericano más grande de Europa.
La fiesta que ya tradicionalmente se celebra en el sur de Londres, concretamente en el parque de Burgess, comienza con una 'entrada' (como la llamamos en Bolivia) folclórica, claramente liderada por entusiastas bolivianos que dedican varias horas de preparación para tomar las calles de Camberwell a ritmo de diablada, morenada, caporales, pujllay y tinku. A ellos, claro, se suman rítmicas, carismáticas y pegajosas cumbias colombianas y batucadas brasileras y varios otros entusiastas bailarines.
El desfile es simplemente el preámbulo de la fiesta grande. En el parque, un impresionante montaje de escenarios, stands de productos latinos, artesanías e incluso organizaciones civiles y ONGs, pero además -lo que a mi más me atrajo, debo confesar- una variedad de sabores que reconforta, más que el paladar, el alma misma. (Entre paréntesis, la preparación de los platos, los ingredientes y peculiaridades no tiene realmente que envidiar a los del otro lado del Atlántico).
Olores, sabores y colores. Ritmos, acentos, miradas y risas que reviven y 'trasladan' el sabor de la tierra de uno hasta esta curiosa isla noratlántica.
Comparto con ustedes algunas fotos de un hermosísimo día:
No hay manera de negarlo, vayamos a donde vayamos nuestras costumbres echan raíces...
ResponderBorrarUn verdadero carnaval!!!, un buen pretexto para ensalzar a los pueblos de América Latina en un canto a la unidad!
ResponderBorrarAbrazos!