28 de febrero de 2016

El Ático, una librería con olor a libros


Librería ÁticoLa librería Ático no tiene sitio web, página de Facebook ni libros nuevos. Ático es una de esas librerías inesperadas que me topé por casualidad en la ya ritual búsqueda de libros al salir de Bolivia.

En realidad me había de propuesto deambular al atardecer por la Colonia La Roma, bohemio -y ahora hispter- barrio de la Ciudad de México. Una vez retomé un punto de referencia conocido giré rumbo a El Péndulo, una cadena de librerías con el formato "bibliocafé", tienda de suveniers, CDs y todo lo que parece demandar el negocio de los libros hoy por hoy, cuando me topé con un escaparate lleno de libros en plan avenida Av. Alvaro Obregón (número 118-B).

Librerías como Ático son refugios de la palabra y el texto que se resiste a desaparecer. El dueño y persona a cargo parece estar desafíando de forma quijotezca la cultura pop del consumo y el entretenimiento recurriendo a una máxima, libros de todo tipo pero cuidadosamente seleccionados y categorizados. En lo que a mis intereses concierne, me llamó mucho la atención una sección de periodismo, justo pegada a la de política. Había un díalogo entre ambas secciones que me dejó más que sorprendido. Una muestra: el libro de W.A. Wood, "periodismo electrónico" de 1969, un análisis de cobertura en tiempo real y adaptación a las "nuevas tecnologías".

Librería Ático
Recuerdo haber visto algo así en Montevideo (en Buenos Aires me parecieron más anticuarios), aunque más pequeñas, una librería donde el cuidado en el tema y calidad de los títulos van por delante del mercadeo o el último "best seller". Librería Áltico de la Roma en Ciudad de México bien podría ser un templo del fetiche bibliográfico.

Librería ÁticoAdemás, me dejó impactado el olor a libro del lugar, ese aroma profundo del papel impreso que pasó por cuántas manos y que ya prácticamente no sientes en ninguna librería (que son cafeterías o viene todo con envoltorio de plástico).

Ático, que mantiene un descontinuado blog, no se trata de una tienda vintage -o al menos no sólo-, tampoco la vi como culto a lo viejo, sino que intenta mantener viva la eterna manera de buscar un libro, antes de la era de Amazon o las grandes cadenas.

Pudo se cualquiera , pero salí con "el Reino y el Poder" del norteamericano Gay Talese, ícono del periodismo de aquel país de los años 60 y 70.

14 de febrero de 2016

Referendo 2016: 4 ideas esclarecedoras sobre las encuestas

periodismonegro.com

Las encuestas son instrumentos frecuentes de campañas políticas y electorales. Los métodos delevantamiento se han ido sofisticando y adaptando a patrones diversos culturales.

Las encuestas en medios, como las publicadas esta semana por Mori, Captura e Ipsos, son, por así decirlo, "la punta de un iceberg". Es decir, al momento de recolectar información las empresas incluyen por lo general una batería de preguntas con más detalles o datos y que permiten diversos cruces. Esta información llamémosla adicional se ofrece a equipos de campaña (o ya está encargada de antemano) para la toma de decisiones sobre el curso de las estrategias.

No sé usted, pero yo no he visto esos resultados de mayor profundidad, así que me limito a compartir cuatro ideas esclarecedoras a una semana del referéndo por la modificación de un artículo de la Constitución sobre la reelección del presidente y vicepresidente.

infografía: La Razón
  • Las encuestas mostrarían la ineficacia de las estrategias de campaña -insisto hasta principios de febrero. Con tantos millones en pauteo y materiales de campaña el SÍ bajo algunos puntos y el NO apenas se mueve un par para arriba, sin grandes cambios. Esta elección se decide en la recta final que ya "corremos" y parece agendada.
  • Estas encuestas, las tres, de muy similares resultados por cierto, muestran una "fotografía borrosa". Se recogen a fines de enero y principios de febrero cuando quizá el hecho de quiebre más significativo se da días después.

  • El voto es un acto emotivo y las campañas apuntan, sobre todo, a atraer a los denominados indecisos, ese 15% en promedio que señalan las últimas encuestas. Los indecisos en general tienen una distancia con la política y deciden días previos su voto. Aquí resultaría clave que las encuestas digan dónde viven (urbano o rural) y qué a nivel socioeconómico pertenencen. Si los indecisos fueran más urbano y de clase media, entonces habría pocas chances para el SÍ (dadas la tendencia y las condiciones actuales).
  • Dado que no es una elección, lo que importa son los votos absolutos y no las proporcionalidades ni las territorialidades. Así, donde se define este referéndum es en el eje donde podría haber algún margen de disputa. A tomar en cuenta: el voto por el NO se muestra consolidado en Potosí y Chuquisaca; departamentos más poblados que Tarija, Beni y Pando que supondrían un efecto marginal; y el voto en el exterior se inclina por el SÍ (la fuerza del voto cautivo en Argentina y Brasil).
Una consideración final sobre el histórico de votación: hay un 12-15% de ausentismo, siempre más alto en el área rural que urbana.

Hasta el próximo domingo con, esperemos, resultados finales.